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7 estrategias para estudiantes con TDAH (Pódcast)

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Estrategias para Estudiantes con TDAH: 7 Métodos Efectivos

Por René Torres

Introducción: El desafío del estudio para estudiantes con TDAH

El Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) es una condición que afecta a millones de estudiantes en todo el mundo, dificultando su capacidad para concentrarse y organizarse. Para muchos, las distracciones son constantes, y la falta de estructura en los entornos de estudio puede hacer que tareas cotidianas como leer, escribir o prepararse para un examen se vuelvan casi imposibles. Sin embargo, con las estrategias para estudiantes con TDAH adecuadas, es posible no solo superar estos desafíos, sino también alcanzar un rendimiento académico notable.

Estas estrategias están diseñadas para mejorar la concentración, la organización y, en última instancia, el éxito académico. A lo largo de este artículo, exploraremos diferentes métodos que han demostrado ser efectivos para estudiantes con TDAH, basados tanto en investigaciones como en experiencias personales.

Comprender el TDAH: Cómo afecta la capacidad de estudio

estrategias para estudiantes con TDAH

El TDAH se manifiesta de diversas maneras, pero entre los síntomas más comunes están la dificultad para mantener la atención, la impulsividad y, en algunos casos, la hiperactividad. Estos síntomas pueden variar en intensidad y pueden afectar diferentes áreas de la vida académica de los estudiantes. Por ejemplo, algunos pueden sobresalir en materias que implican creatividad o resolución de problemas prácticos, mientras que otros pueden tener dificultades con las asignaturas teóricas que requieren una mayor concentración sostenida.

En mi experiencia personal, el TDAH complicó mi capacidad para concentrarme en asignaturas teóricas. Las materias prácticas, como matemáticas o las ciencias, donde podía resolver problemas paso a paso, me resultaban mucho más sencillas. Sin embargo, cuando se trataba de memorizar conceptos o fechas, como en derecho, experimentaba un constante desánimo, preguntándome por qué mis compañeros podían aprender con más facilidad mientras yo luchaba por concentrarme.

estudiantes con TDAH

1. Adaptar las estrategias según el tipo de materia

Una de las estrategias para estudiantes con TDAH más importantes es reconocer que no todas las materias requieren el mismo enfoque. Las materias prácticas, que implican acción y resolución de problemas, tienden a ser más fáciles de manejar para los estudiantes con TDAH. Por ejemplo, en asignaturas como matemáticas, la repetición de ejercicios resulta extremadamente útil. Resolver el mismo problema varias veces, y luego cambiar los números o las variables, ayuda a reforzar los conceptos clave.

Para las materias teóricas, es esencial transformar la información en algo tangible y manejable. Una técnica eficaz es convertir los conceptos abstractos en esquemas visuales. Leer un texto y subrayar las ideas clave es solo el primer paso. Luego, crear esquemas o mapas mentales ayuda a organizar la información de manera que sea más fácil de entender y recordar.

Consejo: Después de crear un esquema, es útil borrarlo y volver a hacerlo varias veces. Esta repetición no solo ayuda a retener la información, sino que también permite visualizarla de diferentes maneras, facilitando su memorización.

2. Utilizar la repetición y la estructura

Otra de las estrategias para estudiantes con TDAH clave es la repetición y el uso de una estructura consistente. La repetición no solo es útil en materias prácticas como matemáticas, sino que también puede aplicarse a cualquier asignatura. La clave está en diseñar un proceso estructurado para estudiar. Para los estudiantes con TDAH, que a menudo se sienten abrumados por la cantidad de información que deben procesar, dividir las tareas en pequeños bloques es fundamental.

Cuando llegué a la universidad, me encontré con una carga académica muy pesada y noté que mi rendimiento cayó significativamente. Esto se debió en gran parte a la falta de estructura en mi día a día, algo que había tenido durante mis años de primaria y bachillerato. Al implementar una rutina más rígida, que incluía horarios de estudio específicos, pude recuperar mi rendimiento. Crear bloques de estudio de 25 o 30 minutos, seguidos de pequeños descansos, me ayudó a evitar la fatiga mental y mantener el enfoque.

Consejo: Establece una estructura diaria o semanal para tus estudios, reservando tiempos específicos para cada materia y dividiendo las tareas en fragmentos pequeños y manejables. Esto te permitirá concentrarte mejor y evitar la sobrecarga cognitiva.

3. Organizar y planificar el estudio

La planificación y organización son significativos dentro de las estrategias para estudiantes con TDAH. Para los estudiantes que luchan por mantener el enfoque, organizar las tareas de manera visual puede ser extremadamente útil. El uso de agendas, calendarios y listas de tareas puede marcar una gran diferencia. Dividir grandes proyectos o exámenes en tareas más pequeñas y manejables permite que la mente no se sature con demasiada información a la vez.

Una estrategia que siempre me ha resultado útil es la de usar recordatorios visuales. Los calendarios físicos o las notas adhesivas me permiten ver claramente mis objetivos a corto y largo plazo, lo que reduce el estrés de tener que recordar constantemente qué tareas tengo pendientes.

Consejo: Utiliza herramientas visuales como calendarios físicos, pizarras o notas adhesivas para tener una visión clara de tus tareas y compromisos. Esto te ayudará a mantenerte organizado y evitará olvidos.

4. Incluir el deporte y las artes marciales

El ejercicio físico es esencial para cualquier persona, pero para los estudiantes con TDAH, el deporte puede ser una herramienta vital para mejorar la concentración y el enfoque. En mi experiencia personal, practicar judo me ayudó no solo a liberar energía, sino también a mejorar mi capacidad de concentración en los estudios. Las artes marciales, en particular, promueven la disciplina mental y física, lo que es extremadamente beneficioso para estudiantes con TDAH.

Estudios han demostrado que el ejercicio regular ayuda a mejorar la función cognitiva y la capacidad de concentración en personas con TDAH. Deportes como el yoga, el judo o cualquier actividad física que requiera enfoque y coordinación pueden ser especialmente útiles.

Consejo: Integra actividades físicas en tu rutina diaria o semanal. No solo te ayudará a liberar energía, sino que también mejorará tu capacidad para concentrarte durante el estudio.

5. Incorporar pausas y aprendizaje activo

Otra de las estrategias para estudiantes con TDAH es el uso de pausas regulares durante el estudio. El método Pomodoro, que implica trabajar en bloques de 25 minutos seguidos de una pausa de 5 minutos, es especialmente útil. Esta técnica no solo permite al estudiante con TDAH mantenerse concentrado por períodos cortos, sino que también le da la oportunidad de tomar descansos regulares para recargar energías.

El aprendizaje activo es otra herramienta fundamental. Involucrar tanto el cuerpo como la mente durante el estudio puede mejorar considerablemente la retención de información. En lugar de solo leer o escuchar, es útil hacer esquemas, resolver problemas o incluso moverse mientras se estudia.

Consejo: Estudia en bloques de tiempo cortos, seguidos de pausas breves para evitar la fatiga mental. Durante el estudio, emplea técnicas de aprendizaje activo, como crear mapas conceptuales o hablar en voz alta mientras estudias.

6. Limitar el uso de la tecnología

Aunque la tecnología puede ser una herramienta valiosa, para los estudiantes con TDAH, también puede ser una gran fuente de distracción. Es fácil caer en la tentación de revisar el teléfono constantemente o distraerse con las redes sociales mientras se estudia. Por esta razón, es crucial limitar el uso de dispositivos electrónicos durante las sesiones de estudio. Apagar las alarmas y notificaciones es absolutamente necesario.

En mi caso, descubrí que reducir el empleo de teléfonos móviles y tablets durante el estudio fue clave para mejorar mi concentración. Establecer tiempos específicos para revisar correos electrónicos o redes sociales, y evitar el uso de dispositivos que no sean esenciales para el estudio, puede marcar una gran diferencia.

Consejo: Establece límites claros para el empleo de la tecnología durante el estudio. Si es posible, utiliza aplicaciones que bloqueen el acceso a redes sociales o sitios web durante tus sesiones de trabajo.

7. Personalizar las estrategias y perseverar

No todas las estrategias para estudiantes con TDAH funcionarán igual para todos. Cada estudiante debe encontrar las técnicas que mejor se adapten a su estilo de aprendizaje. El proceso puede implicar probar diferentes métodos hasta encontrar aquellos que den los mejores resultados.

En mi experiencia, la clave está en ser flexible y estar dispuesto a experimentar con diversas estrategias hasta descubrir las que realmente funcionen. La perseverancia es fundamental, ya que puede llevar tiempo ajustar las técnicas y adaptarlas a tus necesidades individuales.

Consejo final: Mantén una mentalidad abierta y prueba diferentes enfoques de estudio. A medida que avances, ajusta las estrategias según lo que funcione mejor para ti y recuerda que la clave está en la perseverancia.

René Francisco Torres Jugo

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